No solo es uno de los juegos de mesa más destacados de cualquier casino, también está rodeada de anécdotas, supersticiones y momentos históricos que han alimentado su leyenda. Desde apuestas millonarias hasta rituales insólitos, este juego ha inspirado relatos que mezclan azar, estrategia y hasta un toque de mística. ¡Repasamos las mejores curiosidades de la Ruleta!
Si eres un apasionado de este emblemático pasatiempo, seguro que conoces sus títulos más destacados de Evolution y has consultado nuestra Guía de Ruleta y nuestros trucos para apostar en ella, pero hoy queremos que la conozcas mejor a través de algunos hitos, mitos y récords más destacados. ¿Nos acompañas por este viaje?
El número 17: el más famoso del tapete
Si hay un número con reputación especial en la ruleta, ese es el 17. No es casualidad que muchas películas y series lo muestren como la apuesta por excelencia, ni que buena parte de los jugadores lo elijan de manera instintiva. Su posición, justo en el centro del tapete, lo hace visualmente atractivo y fácil de recordar.
Pero la verdadera leyenda del 17 nació gracias a una anécdota que aún se recuerda en el mundo del juego. En 1963, el actor Sean Connery, recién convertido en James Bond, visitó el Casino de la Vallee, situado en la localidad italiana de Saint-Vincent, perteneciente al Valle de Aosta.
Tras insistir varias veces en apostar al 17, la bola cayó sobre ese número tres veces seguidas. Una racha que estadísticamente parece imposible —las probabilidades rondan una entre 50.000— se convirtió en parte de la historia del cine y del propio juego.
Desde entonces, el 17 se ha transformado en un auténtico número fetiche. Jugadores ocasionales lo prueban por aquello del «algo tendrá», y muchos habituales lo incluyen siempre en su repertorio de apuestas, aunque sepan que no hay magia detrás, solo azar. Sea como fuere, esa combinación de mito y glamour lo ha convertido en el número más icónico de la ruleta.
Supersticiones en la Ruleta
El azar es impredecible, pero eso no ha impedido que los jugadores desarrollen rituales que les hacen sentir más seguros. Algunos de los más extendidos son:
- No cruzar las piernas: se dice que bloquea la buena suerte.
- Soplar la bola o las fichas: en casinos tradicionales era un gesto habitual antes de que comenzara el giro.
- Colores en la ropa: apostar a rojo y llevar una prenda de ese color como amuleto, o lo mismo con el negro.
- Golpecitos en la mesa: algunos jugadores dan pequeños toques con los nudillos antes de apostar, como si despertara la suerte.
- Evitar el número 13: mientras para algunos es símbolo de mala fortuna, hay quienes lo consideran su amuleto personal.
Aunque ninguna superstición altera las matemáticas del juego, siguen formando parte del ambiente, se pueden ver en los torneos online y añaden un toque pintoresco a cada partida.
Récords increíbles en la Ruleta
La historia del juego está llena de récords que parecen sacados de una de las mejores películas de Casino jamás rodadas:
- La mayor apuesta a un solo giro: en 2004, Ashley Revell vendió sus pertenencias y apostó todo lo que tenía, 135.000 dólares, al rojo en el Plaza Hotel & Casino de Las Vegas. El joven británico duplicó su dinero a 270.600 dólares, al caer la bola en el 7 rojo.
- El hombre que quebró el banco de Montecarlo: un ingeniero británico, Charles Wells, pasó a la historia en 1891 al ganar una fortuna en varias mesas, hasta el punto de que el casino tuvo que detener temporalmente el juego al superar el premio sus reservas de 100.000 francos. Este hecho inspiró ese mismo año la canción «The Man Who Broke the Bank at Monte Carlo», de Fred Gilbert y popularizada por Charles Coborn; así como, bajo el mismo nombre, la película de Stephen Roberts (1935) y el libro de Michael Butterworth (1983).
- Rachas interminables: según se cuenta, en 1943, se registraron 32 salidas consecutivas de color rojo en un casino estadounidense. Un hecho estadísticamente raro, con una probabilidad de una entre 10 billones, que atrajo la atención de todo el mundo.
- Plenos legendarios: en el año 2000 el escritor Graham Sharpe documentó el testimonio del supervisor Barney Vinson, quien aseguró que en la ruleta 211 del Caesar’s Palace de Las Vegas el número siete salió seis veces consecutivas, pasada la una y media de la tarde.
- Ganancias online sorprendentes: con la expansión de los casinos digitales, algunos jugadores han logrado multiplicar apuestas mínimas en cuestión de segundos, alcanzando premios de cinco cifras en un par de giros. En Malta, en septiembre de 2011, un jugador logró 180.000€ en dos sesiones: la primera con 100.000 en 13 rondas; y la segunda, con 80.000€ en 29.
La cara científica de la ruleta
Aunque muchos la ven como un simple juego de azar, la ruleta siempre ha despertado la curiosidad de la ciencia. El primero en acercarse, aunque de forma indirecta, fue Blaise Pascal en el siglo XVII. Mientras buscaba crear una máquina de movimiento perpetuo, acabó diseñando un mecanismo giratorio que ha inspirado la base del juego que ha llegado a nuestros días.
A lo largo de los siguientes siglos, matemáticos, estadísticos e incluso físicos han intentado descifrar si hay alguna forma de «vencer» a la ruleta. Desde estrategias como D’Alembert o la secuencia de Fibonacci a lo sucedido en los años 70 del siglo XX, cuando un grupo de estudiantes de Física de la Universidad de California escondió dispositivos y cámaras para medir la velocidad de la bola y el giro del cilindro, con el objetivo de intentar predecir en qué zona podía caer.
Aunque los casinos se dieron cuenta rápidamente y reforzaron la seguridad, estos experimentos dejaron claro que el juego no solo es entretenimiento, también es un reto para las mentes más brillantes.
Hoy, los parámetros científicos son claros: aunque con una ligera ventaja para la casa, la ruleta está diseñada para que el azar prevalezca. Pero esa mezcla entre fortuna, probabilidad y física sigue alimentando teorías y manteniendo vivo el mito de que, quizás, en algún momento, la ciencia pueda ganar la partida. ¿Llegará a suceder?